Arturo Frondizi nace todos los días
Por: Juan Pablo Carrique, presidente del Movimiento de Integración y Desarrollo
Un día como hoy, pero del año 1908 en Paso de los Libres, Corrientes, nacía Arturo Frondizi. Probablemente, se dé en distintos puntos del país, más de un homenaje. Quizás algunos, hasta de manera vergonzosa, intenten apropiarse de su imagen. Seguramente se lo recuerde en diversos actos organizados para destacar su obra de gobierno, más de lo que la historia se está encargando. Posiblemente, como ya ocurriera en el año 2015, tengamos un candidato presidencial definiéndose desarrollista y ferviente admirador de su figura.
Pero Arturo Frondizi nace todos los Días. Nace, porque todavía estamos en deuda con entender su pensamiento.
Pensamiento que nos enseñaba a priorizar la dimensión del humanismo. Él estaba seguro que en la realización de los sueños de cada argentino no podía tener lugar el odio, los enfrentamientos, los antagonismos y la actual grieta. Esto desintegra, posterga y genera asimetrías en lo social, en lo cultural y en lo productivo. Lo traía en su ADN, que aún apasiona a muchos de nosotros.
Arturo Frondizi nace todos los Días porque todavía estamos en deuda de reconocer lo revolucionario e innovador de su gobierno.
Un gobierno pragmático para administrar las soluciones que demandaba el momento histórico de nuestro país. Cuando gobernó, no titubeo en reformular sus propias hipótesis para dejar atrás al subdesarrollo. Fue un soldado de la Nación en el campo de batalla, no dudó. Integrar y desarrollar todos los sectores no era un relato de barricada, era una visión de largo plazo para el país, traducidas en decididas y audaces Políticas de Estado.
Arturo Frondizi nace todos los Días porque todavía estamos en deuda con su propuesta de Futuro.
Futuro que tiene como protagonista al Movimiento Nacional. Debemos salir de este atraso cíclico y enfermizo. Su mensaje es impostergable: tenemos que buscar soluciones innovadoras, sustentables y reales para los problemas que nos plantea el mundo. Su coraje y la intransigencia de sus convicciones nos desafían a trabajar y avanzar en la lucha por el desarrollo.
Estas breves palabras no son un homenaje. No pretenden en absoluto ser un recordatorio más entre tantos de la figura de uno de los presidentes más innovadores, transformadores y revolucionarios de nuestra historia.
Estas breves líneas son escritas para recordarnos y recordarle a todo el arco político que Arturo Frondizi nació un día como hoy, pero nace cada día que pasa con la necesidad de ver su sueño cumplido: un país que pueda brindarle a cada uno de sus habitantes las condiciones materiales para su desenvolvimiento espiritual, material y económico, un país desarrollado.
Arturo Frondizi sigue naciendo todos los días esperando que construyamos un país más justo.