Hubo 5 mil usurpaciones de propiedades en el último año
Desde enero de 2021 a enero de 2022 se produjeron en la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano bonaerense más de 5.000 usurpaciones de casas, terrenos, galpones, departamentos y locales comerciales, perpetrados por al menos 300 bandas dedicadas a este rubro.
Según se desprende de un informe de la ONG Defendamos Buenos Aires, una de las consecuencias negativas que trae el aumento de este ilícito es que en aquellos barrios donde se produce con más intensidad el valor de la propiedad cae hasta un 30 por ciento.
Los especialistas consultados advirtieron que las ocupaciones se producen con más frecuencia en los meses de verano, cuando la gente se va de vacaciones.
El modus operandi de estas bandas es ingresar en forma violenta o clandestina a inmuebles, ocuparlos con un grupo de usurpadores donde abundan las mujeres y los niños y colocar en la finca, local, departamento, galpón o terreno usurpado, a un grupo de personas mayores de edad, que munidas de documentación falsa, se presentan como inquilinos o dueños del inmueble usurpado.
“Los intrusos utilizan argucias alegando contratos apócrifos o entregas de posesión y tienen abogados que ya han presentado escritos para que no los puedan sacar de allí y los hacen pasar como víctimas de estafas. Ponen de por medio a menores de edad, por lo cual la justicia tarda más en desalojar”, señaló Jorge Vidal, especialista en seguridad pública y analista en inteligencia delictual.
A partir de las cifras que arrojó la Encuesta Mensual de Inseguridad, Defendamos Buenos Aires alertó sobre “un infierno de usurpaciones durante el último año de pandemia por el coronavirus” en la provincia de Buenos Aires y en la Capital Federal.
“El ministerio de Seguridad bonaerense y su homónimo porteño han emitido varios informes durante el último año que nos hablan de una proliferación de usurpaciones en San Martín, Lomas de Zamora, Quilmes, José C. Paz, Moreno, Villa Ballester, Morón y Ramos Mejía; todos barrios de la Provincia de Buenos Aires y en Belgrano, Palermo, Núñez, Colegiales, Almagro, Pompeya y Recoleta, en la Capital Federal”, precisó el trabajo.
“Si bien no hay estadísticas oficiales, se producen en promedio unas 15 usurpaciones diarias, o 450 mensuales, o 5.400 anuales en ambas jurisdicciones, lo que nos pone frente a una verdadera megaempresa de despojos”, dijo Javier Miglino, abogado especialista en seguridad y director de Defendamos Buenos Aires.
El especialista advirtió que hay un número negro de casos de usurpaciones que queda oculto porque no se denuncia. “El número apuntado queda fuera de la realidad cuando lo contrastamos con los cientos de usurpaciones que no se denuncian pero que se realizan en plena noche y en casas vecinas, aprovechando que la gente está asustada y en casa”, señaló el especialista.
Para el letrado “se trata de delincuentes que buscan enriquecerse, vendiendo luego los inmuebles para así volver a usurpar. No hay necesidad de vivienda ni nada que se le parezca sino un auténtico accionar mafioso de delincuentes que dejan en la calle a más de una familia o entidad de bien público, cuando usurpan su vivienda o sede social”.
El arquitecto y broker inmobiliario Oscar Puebla analizó cómo la inseguridad afecta al mercado inmobiliario y señaló que “lamentablemente hay barrios donde los vecinos viven tras las rejas”. Según el especialista “la inseguridad de la zona ya es un rubro a tener en consideración en el momento de tasar un inmueble”.
“Hay zonas donde no hace mucho los chicos jugaban en la calle, el costo de la seguridad es otro gasto mas que los ciudadanos deben afrontar por falta de políticas que solucionen el problema de raíz”, agregó.